Monotipo con témperas

 Introducción

En esta entrada recogeré lo trabajado durante la sesión práctica del día 22 de marzo, dedicada a  la realización de dibujos de monotipo con temperas. 

Desarrollo

Monotipo

El término monotipo proviene del griego "monos", único y "tipos", modelo; de ahí que el significado de monotipo en el ámbito de la mono impresión sea el de único modelo o bien, único grabado. 

Según la definición del Diccionario del Dibujo y la Estampa es: “Estampa a la que se transfiere por contacto la imagen pintada o dibujada en un soporte rígido cuando el pigmento está todavía fresco. Desde el punto de vista no solo de la técnica sino también del lenguaje, el monotipo está a caballo entre la pintura, el dibujo y el arte gráfico, con el que coincide en el hecho de que el producto final es una estampa, es decir, el soporte que contiene la imagen definitiva es distinto de aquél en el que ha intervenido el artista. Sin embargo, se diferencia del arte gráfico en la más específica genuina y peculiar de sus características: la multiplicidad del producto. En efecto, al no ser fijada permanentemente la impronta en el soporte y, en consecuencia, no ser entintada durante la estampación – el propio pigmento empleado por el artista es el que crea la imagen transferida-, resulta imposible obtener más de una estampa por este método – de ahí su nombre -. El pigmento usado con mayor frecuencia para pintar es el óleo. Aunque conocido desde el siglo XVII, han sido los artistas del XX quienes se han sentido verdaderamente atraídos hacia el monotipo debido a la originalidad de sus texturas". 

Su invención está atribuida a Giovanni Benedetto Castiglione (Génova 1609-1665). Sin embargo, son multitud los artistas que se han dedicado a trabajar el arte del monotipo. Vamos a ver algunos de ellos: 

                                   Figura 1. Cabezas de hombre y mujer. Monotipo de Edgar Degas

                                                                  Figura 2. Monotipo de Paul Gauguin

                                                  Figura 3. Three ballet dancers. Monotipo de Edgar Degas

Procedimiento

Para la realización de esta práctica han sido necesarios una serie de materiales, como son: una lámina de acetato en tamaño A3, folios blancos de tamaño A4, fotografías impresas, pinturas de tempera de varios colores, paletas, agua y pinceles.

La práctica ha consistido en pintar libremente sobre una lámina de acetato. Se trata de láminas transparentes compuestas por celulosa y una combinación de varios ácidos. Se caracterizan por estar compuestas de un material resistente y que se ve poco afectado por la humedad.  En nuestro caso, hemos aprovechado la gran capacidad absorbente del acetato para utilizarlo como base en la pintura con temperas. 

En primer lugar, hemos seleccionado una fotografía impresa entre la gran variedad de modelos que ha traído nuestro profesor. Estas fotografías mostraban en su mayoría modelos de personas realizando movimientos y expresiones corporales muy diversas. La fotografía elegida la hemos colocado sobre la mesa, situando encima de ella la lámina de acetato. 

Tras esto, hemos comenzado a pintar libremente sobre la lámina, utilizando la fotografía como modelo. Para pintar, hemos utilizado temperas de cuatro colores: azul, blanco, rojo y amarillo. De esta manera, hemos ido experimentando por nosotros mismos y realizando mezclas variadas. Además, hemos utilizado un pulverizador de agua para jugar con las tonalidades y evitar que la pintura se seque rápidamente.

Una vez habiendo pintado sobre la lámina, hemos colocado un folio blanco sobre ella y lo hemos presionado desde el centro. Así, la pintura del acetato se ha podido adheir adecuadamente al folio.

A lo largo de la práctica hemos ido probando a pintar a partir de varias imágenes. El objetivo ha sido salirnos de la tendencia que tenemos a la pintura realista y expresarnos libremente sobre la lámina. 

Al principio, hemos realizado simples ejercicios como los siguientes: 

                        Figura 4. Pintura a partir de una lámina de acetato. Elaboración propia

                        Figura 5. Pintura a partir de una lámina de acetato. Elaboración propia

Posteriormente, hemos ido un poco más allá, probando nuevas técnicas, manchas y movimientos. Hemos probado a superponer unas figuras sobre otras, a pintar fondos, a dibujar siluetas, a escribir palabras, a realizar diversas formas, etc. Hemos ido jugando sobre la lámina y experimentando que ocurría al registrar los dibujos en el folio.

Figura 6. Superposición de dos figuras. Elaboración propia

Figura 7. Pintura de silueta y fondo. Elaboración propia

Conclusión

Esta sesión me ha parecido muy interesante y entretenida. Al igual que en otras prácticas anteriores, hemos tenido la oportunidad de expresarnos libremente, abriendo nuestra imaginación, desarrollando nuestra creatividad y guiándonos por nuestra intuición.

En mi caso, nunca había trabajado esta técnica ni la conocía.  Es cierto que es bastante complicada, se necesita poner mucha atención y concentración. Creo que para mejorar la técnica y obtener unos buenos resultados  es fundamental arriesgar, avanzar y experimentar en profundidad.

Bibliografía

Blas, J., Ciruelos, A. y Barrena, C. Diccionario del Dibujo y la Estampa: Vocabulario y tesauro… Real Academia de BB.AA de San Fernando, Calcografía Nacional, Madrid, 1996.

Suárez Castañeda, S. (2022). Estudio y visibilidad del monotipo en las artes visuales.